martes, 3 de noviembre de 2009

El filo del sexo


Entre dientes, boca insultante,
la carne clava a la carne,
la lengua ensalza a la aguja
en la punta del fin provocante.

El ojo presiona las formas,
entre piernas tiran los gritos
las ropas que casi se abren.

Te miro el sentido prohibido
del cinturón combatido.
Y tus ojos me bajan a dedos
botones de celo roídos.

Un gesto perdido en el juego,
el frente de guerra levanta
el jugo vertiente a punto de ganas,

y el gesto se abre en la boca
que corre hiriente de ansia…

Y soy yo, que arrastrado
te doy tregua en el placer de la cama.



Copyright©Marina Navas/ Todos los derechos reservados.

2 comentarios:

  1. Marina:

    Recuerdo haber leído este poema hace algún tiempo, y reafirmo lo que dijera entonces: es apasionadamente sublime.

    Siempre es un gusto encontrar tus letras.
    Un abrazo

    Manuel

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  2. Hola, Manuel:

    Qué gusto encontrarte por aquí. Te invito a que leas mi relato "La tercera piedra", y alguno de los nuevos, que están por ahí. Aún me queda por seguir subiendo nuevos y antíguos. Espero tener noticias tuyas pronto. Siempre tienes mi mail a disposición, el que conoces de ashley, si no, este: samwritesthing@gmail.com

    Un abrazo muy muy grande, Manuel.

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