jueves, 26 de agosto de 2010

Percepción

Mi percepción ¿qué importa?
Es tan opaco el hilo transmisor
de una idea, que el corazón
toma la justicia por su mano,
no entiende de evidencias,
y de percepciones apalea.

Mi percepción, de tu pupila
que falta y de la mano
que en un solo roce
saca su mejor carta,
delante de tu falta de amor,
se queda sola y descalza.

Mi sensación, debilidad
de una ciencia sin argumentos
que valgan, queda a los pies
de una duda infundada.

Decir te quiero no basta
para querer a mi usanza,
que de vieja y rota
no vale para este siglo
de letras gastadas
y frases robadas.

Que por mal usar el verbo amar,
vivimos de mentira una vida,
no queremos aceptar la realidad.
Pero esto, señores, es una percepción
solo mía. No puedo decir más.


Copyright©Marina Navas/ Todos los derechos reservados.

lunes, 16 de agosto de 2010

Las 32 puertas

El miedo tiene solo una puerta para salir.
Siete para entrar. Veinticuatro para vivir.
Tiene una descarada cerradura
para no aceptar cualquier llave,
y una oxidada obertura
que entorpece su imagen.

El miedo mata, destroza, amarra.
Dice que te ayuda a seguir
solo por mantenerte ahí,
sujeto a su crudeza,
a su destino de artificiales agallas.
A la cobardía de las lágrimas tragadas.

El miedo tiene solo una puerta para salir.
Puedes cruzarla y quedarte sin corazón,
o quedarte de brazos cruzados,
¡cobarde por ambición!

Copyright©Marina Navas/ Todos los derechos reservados.